
Y a ver si te piensas que es una pedazo de lámpara de flipar. No, no. Es una lamparita de esas de poner en el salón.

Tenemos que decir en su defensa que más que una lámpara, es una obra de arte y ya sabemos que Harry es un amante del arte y no es la primera vez que se gasta esta pasta. ¡En su casa hay cuadros que valen más de 150.000 euros!

¿A ti qué te parece? Un poquito caro, o entiendes su amor por el arte. ¡Cuéntanos!
No hay comentarios :
Publicar un comentario